miércoles, 25 de marzo de 2015

Aceptar y amar el propio cuerpo.


Hace años topé con un libro (1) muy interesante que iba en la línea del enlace que os pongo un poco más abajo y que hoy me ha emocionado tanto que creo que es importante compartirlo aquí contigo, que te dejas caer por aquí de vez en cuando y agradecer de paso tu presencia.
En el libro de Rita Freedman explica los tres pasos esenciales para amar nuestro cuerpo y son " prestar atención a las necesidades físicas, apreciar los placeres estéticos, sensoriales y sexuales que le son inherentes y aceptación". (2)

Ahora debería releer el libro, aunque en su momento yo creo que me vino bien. 

Luchar contra los estereotipos y las creencias que interiorizamos desde pequeñas es árdua tarea.
Este artículo que es una carta de una hija a su madre y a través de la que podemos darnos cuenta de cuán mal nos tratamos a nosotras mismas y de la importancia que tiene eso en vivir una vida a medio gas y lo que es peor cómo esto se perpetúa y hará que nuestras hijas y las hijas de nuestras hijas, mantengan esa relación con su cuerpo, que las mantiene prisioneras de una estética.

Vivir el cuerpo sin juicio necesita primero conciencia y después aprendizaje. Es decir, es necesario constatar el juicio continuo y la culpa a la que nos sometemos y después empezar a aceptar el cuerpo tal como es, con su belleza y sus defectos, más allá de patrones aprendidos.

El movimiento corporal y la respiración conscientes movilizan la energía y nos permiten un cambio de óptica y un inicio del goce desde un lugar distinto al habitual...
Vivir el cuerpo sin la agonía del juicio contante es muy liberador. Aceptar que tengo un culo generoso y dejar de esconderlo, sería un ejemplo claro de relajación.
Os invito a leer el enlace de más abajo y que reflexionemos sobre este tema que tanta influencia tiene sobre las personas, sobretodo en nosotras las mujeres. Por nosotras  y por las que nos suceden. Vivir con plenitud necesita nuestro cambio y reflexión.










Imagen tomada de  
http://www.tiemporeal.mx/opinion/8787


(1) Rita Freedman, Amar nuestro cuerpo, Guía Práctica para mujeres . Cómo gustarnos a nosotras mismas , Ediciones Paidós, 1991.

(2) Ídem, página 16.

miércoles, 11 de marzo de 2015

Píkara Magazín: presentación en el Ateneu Candela de Terrassa



Fue un placer estar ayer tarde, dos días después del 8 de marzo, en la presentación de Píkara Magazín en el Candela en un encuentro organizado por la Guerrilla dels Cossos y la librería Synusia.
Estuve a punto de quedarme en casa. Estoy en esos días del ciclo en que lo que el cuerpo me pide es estar hacía adentro, y estar quieta, bajo una mantita tibia que me aporte el calor que me hace falta.
En un momento de "debilidad" en la tarde, caí bajo los influjos del móvil y vi que era la presentación de la que me habló mi amiga E., del grupo de la Guerrilla, y me dije que no podía perdérmelo. Me dejé llevar por mi intuición, a la que pocas veces hago caso en mi forma habitual y "razón-able" de ir por la vida, y para allá que me fui. Valió la pena el esfuerzo.
Quiero dar las gracias desde aquí a las organizadoras. Ayer no tenía el cuerpo para vida social y menos para coger el micro. Esta también soy yo. Unas veces me como el mundo y otras me metería en la casa de un caracol.
La cosa es que la presentación de June Fernández, me pareció fresca, transparente y muy enriquecedora. Como ella afirmó a lo largo de sus explicaciones, hacía falta un sitio como Píkara para hablar de temas de los que "nos apetece hablar sin que haya un filtro, ni un jefe que nos dicte cómo decir y qué decir" y además con esa línea tan abierta, respetuosa y lúdica de entender la vida.


June Fernández en la presentación por parte de Synusia y la Guerrilla dels Cossos.


Especialmente me gustó esa postura de autocrítica y de no encasillamiento en cuanto al modo de entender el feminismo, desde la conciencia de que todas estamos influidas por el ambiente, del que no siempre somos capaces de escapar. Es un poco el darnos cuenta de que somos lo que somos, más allá de dogmas y "purezas" y que lo interesante es abrir la mente y sobretodo ser capaces de reírnos de nosotras mismas, cuando nos pillamos en la "falta" o en la ignorancia.

 Por eso tengo un lema que dice "La risa, esa cosa tan seria", y por eso, a parte de escribir, me dedico a hacer talleres de movimiento expresivo y risas, trabajando desde lo lúdico y el soltarse, porque el cuerpo dice la verdad, y si observamos atentas, nos habla. Muchos dolores en las cervicales, en la espalda, contracturas, vienen de ir por la vida sin permitirnos cosas y eso nos lleva a andar rígidas, contenidas, tensas...Aprender a soltar esas rigideces no sólo desde lo mental sino desde lo corporal, es muy sano, y todo suma. Por eso me gusta el nombre Guerrilla dels Cossos porque tiene que ver con el cuerpo. Por eso me gusta Píkara, porque el nombre denota sentido del humor e inteligencia, que es justo lo necesario para abordar temas de importancia vital, y que a lo largo de la historia han sido silenciados. Hablar de temas de sexualidad desde una óptica amplia que evidencie la influencia totalitaria que el patriarcado dentro del capitalismo ha ejercido, es imprescindible, a estas alturas de la historia, en que a veces tengo la sensación de que vamos hacía atrás.

Píkara,online magazine.
Edición impresa
AÑO 2
Por todo esto agradezco que haya mujeres capaces de tirar un proyecto así hacía adelante. Crear un espacio para poner luz, para crear debate, para aprender, para visibilizar, me lleva a aceptar que no todo está perdido, que somos muchas las que no nos conformamos con lo que el sistema persiste en mantener como modelo de orden y que tanto sufrimiento genera a quien no entra dentro de los cánones del "deber ser". La diversidad es lo real en este mundo y es la defensa de la expresión de esta diversidad sin tener que ocultarse lo que nos enriquece y nos permite vivir sin miedo. Y eso es lo que debería ser esta vida, un camino de libertad compartido, desde el respeto por lo que Es, más allá de ese "deber ser" al que hacía referencia, y más allá también de los imperativos tan de moda del "Sé, tu puedes". A veces no me apetece ningún imperativo y sólo quiero estar tranquila.

El feminismo hoy sería atender a nuestras necesidades como seres humanos y visibilizarlas y cuestionar los mecanismos, inconscientes y/o premeditados, que impiden la realización plena en nuestras vidas, desde lo sexual, pasando por lo laboral, en lo social, y en las propias casas y familias. De ahí la importancia de la educación de nuestros hijos e hijas. No se trata de inculcarles ninguna "verdad" sino más bien hacerles preguntas que les hagan pensar y ampliar posibilidades.

Por todas estas cosas de las que se hablaron ayer nació este blog. Y por eso también me encantó ver que hay ya en Terrassa un grupo de mujeres inteligentes y con ganas de autoformarse y compartir sobre las inquietudes que nos mueven, nos preocupan o nos alientan, más allá de las instituciones que, muchas veces y por desgracia, acaban siendo dirigidas por intereses partidistas, que necesitan irse poniendo medallas, olvidando trabajar desde la cooperación, valorando y potenciando el mérito en iniciativas que surgen más allá de sus propios organismos.

Desde aquí quiero mencionar la valiosa idea que surgió de las mujeres de la Guerrilla dels Cossos de ir construyendo entradas en la Wikipedia sobre tantas mujeres cuyos logros no han tenido el reconocimiento merecido. Y poner sobre la mesa, que esta sociedad necesita potenciar los valores cooperativos, más allá de los egos, en este caso institucionales. Precisamente las instituciones deben trabajar para la ciudadanía y escuchar y potenciar sus iniciativas, sin apropiárselas, para perpetuarse.

Gracias June, a ti y a todo el equipo, entre el que está Mónica Quesada, que me parece una excelente pedagoga en estas materias y de la que aprendo un montón. Siento haberme marchado ayer sin saludarte. Ya tengo un pedacito de Píkara en casa. Me quedé un ejemplar escrito.

Un abrazo y mil sonrisas!